Estados Unidos de América es una unión federal de 50 estados, además de territorios que no son estados, como el Distrito de Columbia y otros territorios del Océano Pacífico y el Mar Caribe. Cada uno de estos estados posee autonomía (educación y salud públicas, transportes…) y comparte soberanía con el gobierno federal, aunque según la Constitución, cada estado debe transferir ciertos poderes al gobierno central y ningún estado tiene el derecho a separarse de la Unión.
En todos los Estados Unidos, la lengua oficial es el inglés, aunque hay estados con lengua co-oficial como son Louisiana (francés), Hawaii (hawaiano) o New Mexico (español). Cada estado puede organizar su gobierno a su modo, siempre y cuando se atengan a las normas democráticas reguladas en la Constitución. A lo largo de la historia de la nación, casi todos los estados adoptaron una forma de gobierno a imagen y semejanza del gobierno federal, dividiendo los tres poderes, aunque nada impide un legítimo gobierno parlamentario con fusión de poderes. Un caso único en este sentido es el Estado de Nebraska, que a diferencia de los otros estados, sólo posee una cámara. Cada estado es pues una única entidad política soberana perteneciente a una confederación, con poderes legitimados y reconocidos por el derecho internacional como declarar la guerra o mantener relaciones internacionales.
Nacimiento y anexión de estados en la Unión
Los trece estados originales (las Trece Colonias) que se rebelaron contra el Imperio Británico fueron los primeros en obtener su soberanía tras la independencia. Poco después fueron surgiendo otros a partir de los existentes (Kentucky, Tennessee, Maine) o en la mayoría de los casos, a partir de territorios obtenidos durante guerras de conquista o por su compra por parte del gobierno. Estos territorios eran vastas tierras bajo soberanía del gobierno federal, con población asentada, pero que no estaban organizados en estados hasta que consiguieron un cierto autogobierno. Únicamente Vermont, Texas y Hawaii poseían el status de república independiente antes de su anexión a los Estados Unidos.
Once estados surgieron a raíz de la Guerra de Secesión, pero sólo Virginia Occidental, separada de la Virginia original, quedó dividida al final de la contienda. Ciertos estados tardaron en coseguir la anexión a la Unión. Es el caso de Texas, que estaba en guerra con México en 1836, y no consiguió ser parte de los Estados Unidos hasta 1845. O Utah, que por diferencias religiosas con la élite mormona perteneciente a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, practicante de la poligamia, no tardó varias décadas en que su solicitud de anexión fuera aceptada.
Otros territorios
Además de los 50 estados que componen los Estados unidos de América, existen otros territorios, poblados o no, que forman parte de la Nación.
Un ejemplo único es el Distrito de Columbia, territorio federal donde se encuentra la capital, Washington, con todas las sedes federales e instituciones gubernamentales. A parte de este territorio, los Estados Unidos anexionaron a lo largo de su historia tierras en el Caribe, como Puerto Rico o las Islas Vírgenes de los Estados Unidos, o en el Océano Pacífico, caso de las Islas Marianas de Norte, Guam, Samoa Americana, el atolón Midway, el atolón Johnston, la isla Wake, el arrecife Kingman, la isla Jarvis, la isla Baker, la isla Howland, la isla Navaza. Los ciudadanos de estos territorios tienen la nacionalidad estadounidense y poseen los mismos derechos y deberes que cualquier ciudadano, aunque en la mayoría de los casos, están exentos de pagar impuestos federales, no tienen derecho a voto en las elecciones presidenciales y sólo están representados en el Congreso en calidad de observadores. El atolón Palmyra, en el Océano Pacífico está deshabitado, pero forma parte del país como territorio estadounidense.
Otros territorios anteriormente norteamericanos, como los Estados Federados de Micronesia, Palau o la República de las Islas Marshall, consiguieron la independencia del gobierno federal, erigiéndose como estados soberanos con gobierno propio.
Los 50 estados
Durante toda la historia de los Estados Unidos, a partir de 1787 fueron creándose o anexionándose estados. Algunos son denominados históricamente Commonwealths, sin ninguna diferencia legal aparente con el resto de los estados. Esta es la lista de Estados que ingresaron en la Unión, por orden cronológico:
Delaware, 1787
Commonwealth of Pensilvania, 1787
New Jersey, 1787
Georgia, 1788
Connecticut, 1788
Commonwealth of Massachusetts, 1788
Maryland, 1788
South Carolina, 1788
New Hampshire, 1788
Commonwealth of Virginia, 1788
New York, 1788
North Carolina, 1789
Rhode Island and Providence Plantations, 1790
Vermont, 1791
Commonwealth of Kentucky, 1792
Tennessee, 1796
Ohio, 1803
Louisiana (État de Louisiane), 1812
Indiana, 1816
Mississippi, 1817
Illinois, 1818
Alabama, 1819
Maine, 1820
Missouri, 1821
Arkansas, 1836
Michigan, 1837
Florida, 1845
Texas, 1845
Iowa, 1846
Wisconsin, 1848
California, 1850
Minnesota, 1858
Oregon, 1859
Kansas, 1861
West Virginia, 1863
Nevada, 1864
Nebraska, 1867
Colorado, 1876
North Dakota, 1889
South Dakota, 1889
Montana, 1889
Washington, 1889
Idaho, 1890
Wyoming, 1890
Utah, 1896
Oklahoma, 1907
New Mexico (Estado de Nuevo México), 1912
Arizona, 1912
Alaska, 1959
Hawaii (Moku’āina o Hawai’i), 1959
Estados no reconocidos
El estado de Franklin nunca fue reconocido por la Unión, hasta que finalmente lo reclamó Carolina del Norte. Muchos estados votaron por su reconocimiento, pero no se obtuvieron los dos tercios necesarios para la admisión de un nuevo estado de la confederación. Este territorio forma parte actualmente del estado de Tennessee. Otro estado propuesto en numerosas ocasiones (la última en 2005) es Lincoln, que sería formado por los territorios del norte de Idaho y del este de Washington. En 1859 se propuso la creación del estado de Jefferson, en las Montañas Rocosas del Sur, pero finalmente fue a parar a Colorado. Otro Jefferson, en una zona rural al norte de California y sur de Oregón fue propuesto para estado en 1941. Hoy en día se siguen produciendo nuevas propuestas de reorganización territorial y de creación de nuevos estados. La reivindicación más fuerte actualmente es la de convertir a Puerto Rico en el estado número 51 de la Unión.