La bandera de los Estados Unidos de América es uno de los símbolos más reconocibles del país. La bandera consta de trece barras horizontales blancas y rojas (que simbolizan las trece colonias originales que proclamaron la independencia del Reino Unido) y un rectángulo azul en el margen superior izquierdo, que contiene estrellas de cinco puntas blancas, representando a los estados de la Unión. Su nombre popular viene precisamente de su diseño: stars and stripes, o sea, «barras y estrellas», y también inspiró la letra del himno nacional, The star-spangled banner («la bandera tachonada de estrellas»).
El número de estrellas fue aumentando desde 1776, a medida que iban ingresando más estados en la Unión: de las 13 estrellas iniciales se llegó a las 50 actuales. Durante el siglo XIX, los continuos nacimientos de nuevos estados hicieron que la bandera se cambiara por otra cada pocos años. Sin embargo, el siglo XX trajo los diseños más largos y estables de la historia americana.
Origen
Durante la declaración de independencia del 4 de julio de 1776, el recién nacido estado aún no contaba con un estandarte oficial, pero ya en la guerra contra los ingleses se usaban de forma extra-oficial banderas tricolores derivadas de la Union Jack británica. Las hipótesis sobre el origen del diseño de la primera bandera de la nación son numerosas y variadas, aunque ninguna cuenta con un sólido rigor histórico. Quizás la más popular es la que atribuye su confección a Betsy Ross, tapicera cuáquera que recibió la visita de George Washington para zurcir un diseño realizado por el futuro presidente. Este diseño constaba de estrellas de seis puntas, y Ross sugirió cambiarlas por otras de cinco puntas, para mayor facilidad de cosido. En el mismo salón de su casa, la tapicera elaboró la bandera, muy parecida a la actual, que constaba de 13 estrellas formando un círculo en el rectángulo azul. Esta bandera primitiva apenas varió durante los años. Simplemente fue aumentando el número de estrellas en el rectángulo azul. El primer cambio se produjo con la incorporación de los estados de Vermont y Kentucky en 1795. 23 años más tarde, en 1818, el número de estrellas ascendió a 20 y fue aumentando estrella a estrella hasta incorporarse Alaska en 1959 y Hawaii en 1960, configurando la actual bandera de 50 estrellas, el diseño más longevo de la historia del país. Actuales movimientos políticos apoyan la incorporación de la estrella 51 para Puerto Rico, y el departamento nacional de heráldica tiene previstos posibles diseños de hasta 56 estrellas, en previsión de que más estados se adhirieran a la Unión.
La bandera en la sociedad americana
Al contrario que en otros países con un patriotismo menos desarrollado, la bandera estadounidense está muy presente en el día a día de la cuidadanía. No sólo se puede ver en los edificios públicos, sino en multitud de empresas y casas particulares. La presencia se multiplica en días señalados, como el 4 de Julio o el Memorial Day, que recuerda a los soldados americanos caídos. Existen muchas normas de etiqueta que marcan cómo se debe izar, recoger o tratar con respeto la bandera de la Unión, pero muchas veces son ignoradas. Una de ellas es la prohibición de mostrar la bandera en anuncios o de imprimirla en objetos de uso diario; una regla que, como es notorio, nadie en el país obedece.
Una polémica continua alrededor de la enseña norteamericana es la popularmente llamada «enmienda de la quema de banderas». Existe desde hace décadas un tenso debate entre los que opinan que debe aprobarse una ley que prohíba el uso irrespetuoso de la bandera, mientras que el otro bando opina que la libertad de expresión es más importante que la bandera misma, y que una protesta política o social puede incluir quema o desprecio a la bandera sin incurrir en delito. Cada cierto tiempo una nueva votación devuelve la discusión en la actualidad. En 2006 se produjo en el Senado la última hasta el momento, y los partidarios de la libertad de expresión se impusieron por un sólo voto de diferencia.
La bandera como imagen icónica
Existen numerosas imágenes artísticas e históricas con un evidente protagonismo de la bandera. Las intenciones son variadas, pero en su mayoría tienen un eficaz objetivo propagandístico y en algunos casos, promotor de un cierto imperialismo. Las imágenes de la bandera en la Luna o la legendaria fotografía tomada por Joe Rosenthal de unos soldados alzándola en la batalla de Iwo Jima forman parte del imaginario popular del siglo XX, y son dos de las fotografías más conocidas de la Historia. La presencia estadounidense en el mundo desde su nacimiento, ya sea ideológica, económica o militar, se puede trazar incluso en la heráldica: muchos países que accedieron a la independencia después de 1776 adoptaron banderas con un diseño inspirado en el de la enseña de los Estados Unidos. Desde un punto de vista plástico, el artista Jasper Johns, vinculado al pop art y al neo-dadaísmo, utilizó la bandera de los Estados Unidos en muchas de sus obras, ironizando sobre su simbolismo y descontextualizando su significado al tratar el arte como un objeto.
Proporciones
Las proporciones exactas son las siguientes:
Relación altura/largo= 10/19
Altura de cada barra= 1/13 de la altura total
Altura del rectángulo azul= 7/13 de la altura total
Largo del rectángulo azul= 2/5 del largo total
La simbología de los colores fue fijada por la Cámara de Representantes, y afirma que el blanco simboliza la inocencia, el rojo la sangre y el coraje, y el azul el cielo de la nación, símbolo de la perseverancia y la justicia.